El objetivo principal de la obra es estudiar cómo los profesores practican la evaluación y tratar de averiguar por qué se producen las diferencias calificadoras dentro de un marco formal que defiende la objetividad de la evaluación. La metodología de investigación utilizada ha sido el estudio de casos. Para hacer más evidente la falta de objetividad de las calificaciones y, en general, del proceso de evaluación, se ha utilizado el área académica que podría considerarse paradigmática en este sentido: las matemáticas.